Tú me miras, ya lo
sabes tú me miras,
ya lo sé me miras y
la conexión está hecha
me miras y me siento
bien.
Tú me anclas a la seguridad
con tú mirada sólo siento el
hueco de tú marcha forzada.
La paz de tú mirada escaneando
mi estado tú ausencia me incomoda,
pienso y me entristece.
No quiero dejar de recordarte,
no puedo olvidarte.
Me gustaría en mis pensamientos t
enerte presente y que mis ojos no
se entumeciesen.
Toda una vida dedicada a un
esfuerzo sin recompensa, tus
hijos son tu vida, tus hijos tu
alegría.
Gracias por tu esfuerzo,
gracias por convertirme
en lo que soy.
Nunca podré devolverte el
esfuerzo, esfuerzo sin medida,
esfuerzo sin interés.
Te querré siempre... allá donde estés.